La evolución de los discos duros ha sido un tema de conversación que se ha mantenido con el paso de los años. Cuál es el más recomendado, cuál es más fiable en términos de duración, cuál es más veloz y así podríamos seguir y seguir. Lo cierto es que muchas de estas preguntas han sido respondidas y la eterna batalla entre los HDD y los SSD ya no es considerada como tal, ya que los discos de estado sólidos, mejor conocidos como SSD, ahora tiene un análogo que está dando mucho de qué hablar: el SSD M.2 NVMe.
DISCOS DUROS M.2
Los discos duros M.2 son discos de estado sólido con una característica en particular: son más rápidos que los SSD clásicos. Esta particularidad es lo que ha llamado la atención de los usuarios y lo que les ha valido su popularidad.
¿Cuál es la diferencia de los M.2 NVMe con los SSD convencionales?
La primera diferencia radica en la conexión, los SSD convencionales utilizan un conector SATA, al igual que los discos duros HDD, en cambio los SSD M.2 NVMe utilizan un puerto PCIe, el cual está ubicado en la placa base del ordenador, por lo tanto, se produce una mayor velocidad en la transferencia de datos. Un disco duro M.2 también cuenta con cuatro carriles de datos, pero en comparación con los SSD convencionales, estos pueden alcanzar velocidades de hasta 5000 MB/s, los convencionales llegan a alcanzar los 600 MB/s.
Además de la conexión, el diseño del disco duro difiere, ya que los SSD convencionales ocupan gran espacio en el ordenador, a diferencia de los M.2 que son más pequeños que una memoria RAM y permiten ahorrar mucho espacio.
¿Necesito un SSD M.2 en mi ordenador?
Luego de leer una velocidad de escritura y lectura de 5000 MB/s, es probable que empieces a considerar un cambio obligatorio a M.2 pero no te apresures porque la realidad es un poco más complicada de lo que parece. La deseada velocidad de los M.2 viene con un precio exorbitante que reduce considerablemente las posibilidades de adquirir uno tan fácilmente.
Además de esto, es importante recordar que la vida útil de los SSD es mucho menor que los discos HDD y uno de los inconvenientes es que cuando dejan de funcionar, no muestran señales previas, lo cual puede dificultar la recuperación de información.
VENTAJAS DE LOS SSD M.2
Ya sabemos que la velocidad es una de las ventajas de los M.2 con respecto a los SSD convencionales, sin embargo, existen otras que son importantes de destacar:
- Menor tamaño
En comparación con los HDD, la diferencia de tamaño con un M.2 es grande, y como mencionamos anteriormente, ahorra espacio considerablemente.
- Menor calor generado
Como es un componente más pequeño que no utiliza partes mecánicas, el calor generado es menor. Estas bajas temperaturas ayudan a mantener la vida útil del resto de los componentes.
- Menor utilidad de cables
Los SSD M.2 NMVe no requieren cables como los SSD convencionales, al estar conectado directamente a la placa base, es muy rápido el cambio o el acceso al componente.
Fuente: https://pcasistencia.com/
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